domingo, 29 de marzo de 2009

El martirio de mis días

Si nadie me ha amado entonces no le he cantado a la luna y al sol y las estrellas, dejame probarme que no me amaste, así podre vivir sin saber que te he dañado, así seguiré siendo la víctima a quien has defraudado, así moriré sola y sin amigos, así seré infiel a mis enemigos, así tendré atado a mi pecho el martirio de mi días, dejame perdida entre la lluvia, entre la nieve o el sol, en un bosque de pinos escondeme para sentir la frialdad de tu partida, bótame en el fondo del mar para ver que en lo profundo se quiere salir a flote, haz me sentir lo peor para seguir siendo feliz, corta mi respiración para seguir siendo libre, toca mis ideas para parecer mejor, escupe mi cara para hacerme más fuerte, mientele a mi alma para que despierte, ocupa mis sentidos para quedarme callada, sílbame en silencio para recordarte un día, píntate de negro y nubla mi día, despiertame de noche de una pesadilla para seguir viviéndola , tortura mi cuerpo hasta que maldiga, juega con los míos en un tranvía, apártalos del aire que se respira, para que les pida volver a la tumba donde esperaría, llena de flores mi tumba con porquerías para que quede en ella algo que la gente vería, marca mis paredes con equis ennegrecidas para que la gente sepa que allí vivía, vende mis cosas a las ratas de alcantarilla, da les de eso noche y día, muerde mis sesos y arranca mis tripas como recuerdo de lo que sería, critica mi juicio mi ego y mi valía… mírame en un espejo y deprecia mi todo, aborrece mis palabras y mis tonterías, abstrae de mi lo que más valía, cuentale a mis hijos lo que sabías, cuanto me odias y que me querías… perdona a los sabios que conocía, deja que degüellen mis recuerdos y melodías… vomita de mi rostro la grasa muerta que consumía, maldice a mi padre y a mi madre, mejora tu hipocresía, aprende a vivir sin mentiras, sin alguien que te haga sentir que morías…

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